miércoles, 6 de febrero de 2008

El instante ese de vértigo. Cuando en un segundo te entra como una especie de calor en todo el cuerpo, como si por un segundo te envolvieran el cuerpo desnudo en papel de film y te apretaran fuerte. Luego todo ese peso de chocolate cae hasta las puntas de los dedos chupándote con lengua de gato las yemas.

2 comentarios:

Ibar dijo...

Y como sigas siendo de chocolate y escribiendo tan dulcemente te comeras a ti misma, y lo lamentaras!

Un beso ;)

Lucicleta dijo...

qué tal si vuelves a deleitarnos con tus ocurrencias, pitín? :___
quérote